domingo, 26 de octubre de 2014


El cuscuz es conocido en muchos lugares del mundo y si bien desconozco su origen, algo me dice que tiene que ser de algún lugar de África del norte o de la región arábica.

Básicamente es como una polenta más seca y más gruesa que sale con forma de torta aireada.

Se prepara con harina de maíz que se mezcla con la mitad de agua y una pizca de sal unos 10 minutos y luego se coloca en una cuscucera (olla especialmente diseñada compuesta por dos partes, en la superior se coloca el cuscuz húmedo y debajo agua que al hervir cocinará la pasta) que se lleva 10 minutos a fuego lento y se deja reposar 3 minutos más antes de servirlo.

Con su sabor un tanto insulso, es un acompañamiento típico principalmente de desayunos, se puede comer dulce con banana, azúcar, leche de coco, leche condensada, o salado con huevo, manteca, verduras… es altamente recomendable ponerle algo que lo humedezca un poco como aceite o manteca, sino hay que conseguirse una buena patada en el pecho.

Para los viajeros el dato más importante es que es muy rendidor y económico.

Nuestra versión del cuscuz con salchicha y cebollas salteadas

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