Sao Miguel
do Gostoso fue una recomendación de nuestro amigo Víctor. Todo el mundo hablaba
del viento y que era un lugar ideal para el kite-surf… y efectivamente así era.
Nos recibió una playa desierta y mucho más amplia de las que estábamos
acostumbrados. Estacionamos la chanchi y en medio de esa desolación, una
bocina… una familia de suizos que habíamos conocido en Pipa y que el día anterior,
antes de dejar Natal, le habíamos pasado información de qué visitar en la
Mesopotamia argenta. Lo raro fue que ellos nos reconocieron cuando sólo
habíamos cruzado escasas palabras en la playa.
Sao Miguel
es un lugar hermoso para hacer kite surf o wind surf, pero no para estar tirado
panza arriba en la arena, excepto que quieras ser una milanesa humana a los 15
minutos o experimentar la acupuntura de la arena. Las playas son amplias, el
pueblo es muy tranquilo, todavía el turismo no lo invadió demasiado.
En Sao
Miguel do Gostoso conocimos otro italiano “fora do sistema”, Leonardo, con el
que compartimos algunas charlas y seguramente no volvamos a ver ni sabrá que
está mencionado en este blog.
Terminamos
quedándonos solo dos noches en este tan lindo y desértico pueblito, al otro día
retomamos el camino rodeado de molinos de viento hasta Galinhos, una
recomendación de Marilene, una isla también del litoral norte de Río Grande do
Norte a la que se llega en balsa por el río dejando el auto en un estacionamiento
de la municipalidad de este lado de la costa. La ciudad de la isla fue más
grande de lo que imaginábamos (aunque sigue siendo bien chica) y donde todos se
trasladan en buggie o a caballo.
Pasamos esa
tarde caminando hasta el faro por la playa y volvimos para cruzar por balsa y
pasar la noche en el estacionamiento, el cual de día parecía desierto, pero a
la noche los pescadores ser reunieron en un carribar a jugar cartas y beber
cachaca y cervezas, con música y todo. Con un par de cervecitas al lado del río,
le rendimos homenaje a Marilene y las tardecitas en Natal.
Tips para
viajeros:
Al lado de
uno de los estacionamientos frente a la playa en Sao Miguel do Gostoso, en un
acceso donde hay una linda crepería con nombre francés que no recordamos hay un
quincho que pertenece a un restaurante que sólo abre de día. Tiene luz,
enchufe, ideal para hacer campamento. Hay vigilantes de la municipalidad y de
las posadas, y redes de wi fi disponibles.
Hay una
balsa para cruzar a Galinhos gratis que pertenece a la Municipalidad, sólo hay
que preguntar los horarios y esperar un poco.
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Llegamos a Sao Miguel! |
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Nuestro campamento en Sao Miguel |
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Nuestro primer cuzcus, con salchichas y cebollas |
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Amaneciendo en Sao Miguel |
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Metele kite-surf |
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Llenándose de arena en Sao Miguel |
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Energía eólica en Sao Miguel do Gostoso |
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Campamento en Sao Miguel |
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Chau Sao Miguel! |
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Listos para ir a Galinhos |
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El transporte principal de Galinhos |
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El living de la playa de Galinhos |
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Caballitos en la playa de Galinhos |
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Por do Sol en Galinhos con barcos y molinos de viento |